Una señora

Una salida de amigas, (cuatro recién divorciadas) after office y energizantes con vodka, 2x1, que se transformaron en 4x2.

Un lugar con cuatro pistas y seis barras, en una de esas barras lo veo a él, lomo perfecto, cara angelical y 20 años menor que yo.

Química y física a primera vista, lo envuelvo en papel de regalo y lo llevo a casa.

Cuando estaba a punto caramelo me pregunta:

¿Puedo hacer un llamado?

Si, por supuesto!

“Hola mami, no voy a dormir a casa esta noche, no te preocupes, me quedo a dormir en lo de una señora”.

Chan

Ema Pil